Corría el año 1950 cuando Victoria Fernández creaba, en la panadería que regentaba en Villalonga (Valencia) unas magdalenas cuadradas. Bautizadas con el nombre de «Glorias» alcanzaron la fama en poco tiempo. No sabía ella, que ese sería el origen de Dulcesol, una compañía que a día de hoy es dirigida por sus hijos. El 20 de junio cambiará de nombre, Dulcesol pasará a llamarse Vicky Foods, en homenaje a la matriarca del clan.
Más allá del aspecto sentimental del cambio de nombre, la empresa trata de apostar por otro tipo de productos. Productos que siga la tendencia del mercado que penaliza la bollería para ensalzar los beneficios de los productos más saludables. En este sentido y para hacer frente, al escaso crecimiento que estaba registrando la venta de productos de bollería, los productos ecológicos serán un segmento más de su producción.
La idea, en palabras de Rafael Juan, hijo de los fundadores y consejero delegado de la marca, es que todas las marcas de la compañía, estén encuadradas bajo una misma denominación. Tres serán los brazos de Vicky Foods: Dulcesol, Hermanos Juan, y Be Plus. A la fabricación de bollería, y de pan congelado para la hostelería, bajo el nombre de Dulcesol y Hermanos Juan, se une la marca Be Plus. Será la encargada de aglutinar alimentos más acordes con las exigencias de los consumidores que cuidan su alimentación con detalle. La adquisición de la empresa Ecoiberope, que se dedica a la elaboración de productos veganos y ecológicos pone de manifiesto cual es el camino que han decidido emprender. Esta nueva estrategia comercial, esperan que ayude a incrementar los datos de crecimiento de la compañía en el exterior. Es precisamente el mercado exterior el que ha reportado los mejores datos de facturación el pasado año.
Será a partir del 20 de junio cuando Vicky Foods se convierta en una realidad. Vientos de cambio para una empresa familiar que sabe adaptarse al paso del tiempo y a las nuevas exigencias de los consumidores.
